La secretaria de prensa del Ministerio de Defensa de Armenia, Shushan Stepanyan, denunció que Azerbaiyán utilizó bombas de racimo en Tavush que están prohibidas por convenciones internacionales contra Armenia.
Los especialistas del Centro de Desminado y Experiencia Humanitaria continúan trabajando para neutralizar bombas de racimo lanzadas desde Azerbaiyán, pero sin explotar, en las aldeas de Chinari y Choratan, región de Tavush en Armenia.
La secretaria de prensa del Ministerio de Defensa de Armenia, Shushan Stepanyan, escribió sobre esto en su página de Facebook.
Según el centro, el 24 de julio, se encontró una ronda de 122 mm de bombas de racimo en el pueblo de Chinari, y se encontró otra ronda en Choratan.
El proyectil encontrado en Choratan es una munición que contiene metralla y, según las convenciones internacionales, no puede usarse contra civiles. Los proyectiles sin explotar fueron transportados a un lugar seguro y luego destruidos.
¿Qué son las bombas de racimo?
Las bombas de racimo o ‘cluster bombs’ son proyectiles disparadas por sistemas de artillería o desde aviones que explotan en el aire, diseminando pequeñas bombas o submuniciones que pueden abarcar el tamaño de una cancha de fútbol.
Las bombas de racimo son especialmente dañinas pues tienen un efecto extendido e indiscriminado. No se sabe con certeza cuanto daño pueden generar.
Son cada vez más los Estados que se adhirieron o están en el proceso de adherirse a la Convención sobre Municiones en Racimo, que aprobada por 107 Estados en una conferencia diplomática en Dublín, Irlanda, en mayo de 2008.
A pesar de ello, los fabricantes, en su mayoría potencias mundiales, siguen en la industria.