Teherán reabre plenamente su espacio aéreo, tras varios días de restricciones impuestas por motivos de seguridad. Según informó oficialmente la Organización de Aviación Civil de Irán, el espacio aéreo del país está completamente abierto para vuelos nacionales e internacionales, con excepción de dos aeropuertos que aún permanecen parcialmente cerrados.
La mayoría de los vuelos operan con normalidad
El comunicado emitido el 3 de julio por el Departamento de Aviación iraní detalla que todos los vuelos desde y hacia aeropuertos del país se realizarán entre las 5:00 a.m. y las 6:00 p.m. hora local (de 05:30 a.m. a 6:30 p.m. en hora de Ereván), conforme al nuevo cronograma establecido.
“De acuerdo con el horario establecido, todos los vuelos nacionales e internacionales desde los aeropuertos del país, con la excepción de Isfahán y Tabriz, se realizarán durante el día”, precisó la institución.
Las operaciones en Isfahán y Tabriz aún se mantienen suspendidas, pero las autoridades afirmaron que su reapertura está prevista para los próximos días, en cuanto se complete la preparación de la infraestructura necesaria.

El contexto de las restricciones
Aunque no se detallaron las causas exactas de las restricciones que afectaron al espacio aéreo iraní, fuentes diplomáticas citadas en medios regionales las vinculan con tensiones militares recientes y medidas preventivas adoptadas en el marco de alertas de seguridad nacional. Las limitaciones habían afectado temporalmente el tránsito aéreo, especialmente en las zonas cercanas a instalaciones estratégicas.
La decisión de reabrir progresivamente los aeropuertos es vista como una señal de estabilización interna, mientras Irán busca recuperar el ritmo habitual de sus conexiones aéreas regionales e internacionales.
Impacto en la aviación comercial y regional
Con la reapertura del espacio aéreo, las aerolíneas nacionales como Iran Air, Mahan Air y ATA Airlines han comenzado a restablecer sus rutas, lo cual es clave para normalizar el transporte tanto de pasajeros como de carga en una región marcada por tensiones geopolíticas.
El tráfico aéreo sobre Irán es además estratégico para vuelos entre Europa, Asia Central y el sudeste asiático. Su interrupción había obligado a múltiples aerolíneas extranjeras a modificar rutas y horarios, generando retrasos y aumentos de costos operativos.
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