El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está evaluando seriamente la propuesta de Irán para reanudar las conversaciones nucleares indirectas, mientras refuerza su presencia militar en la región, lo que ha generado tensiones con Teherán.
Diálogo y amenazas: una estrategia de doble filo
Funcionarios estadounidenses señalaron que Trump considera que las negociaciones directas serían más efectivas, aunque no descarta el papel de Omán como mediador en las conversaciones indirectas.
«Tras el intercambio de cartas, ahora estamos explorando los próximos pasos para iniciar conversaciones y generar confianza con los iraníes», reveló una fuente del gobierno estadounidense.
No obstante, el mandatario norteamericano renovó sus amenazas contra Irán, afirmando que, si no se llega a un acuerdo, habrá bombardeos o la imposición de aranceles secundarios, similares a los implementados en su primer mandato.

Escalada militar en la región
Mientras evalúa la posibilidad de diálogo, Estados Unidos ha desplegado fuerzas adicionales en Oriente Medio. El CENTCOM anunció la llegada del portaaviones USS Carl Vinson para reforzar la presencia naval junto al USS Harry S. Truman, que ya ha participado en incursiones contra Yemen.
Además, se han desplegado escuadrones de aviones F-35 y bombarderos furtivos B-2 en la base militar de Diego García, en el Océano Índico.
Según el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, Estados Unidos está preparado para responder si Irán o sus aliados amenazan los intereses estadounidenses en la región.
Irán advierte sobre una posible respuesta nuclear
Ante las crecientes tensiones, Ali Larijani, asesor del líder supremo Ali Khamenei, declaró que Irán no busca desarrollar armas nucleares, pero que un ataque estadounidense podría cambiar esa postura.
«Si Estados Unidos o Israel bombardean Irán bajo el pretexto de armas nucleares, nos veremos obligados a avanzar en la creación de una bomba atómica», afirmó Larijani en una entrevista televisiva.
A pesar de que el Ayatolá Jamenei ha emitido una fatwa prohibiendo el desarrollo de armas nucleares, funcionarios iraníes sostienen que la presión militar de Washington podría generar un cambio en la política nuclear del país.
Una posible respuesta iraní en múltiples frentes
El comandante de las fuerzas aeroespaciales del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, Amir Ali Hajizadeh, recordó que Estados Unidos tiene 10 bases militares con 50,000 soldados desplegados en la región, lo que los haría vulnerables en caso de una confrontación.
Una fuente iraní citada por The Telegraph sugirió que, en caso de ataque, Teherán podría responder con bombardeos en la base naval de Diego García, operada conjuntamente por Estados Unidos y Reino Unido.
Además, el parlamento iraní está debatiendo la posibilidad de revisar su doctrina nuclear, basándose en el ejemplo de Corea del Norte, que logró una mayor seguridad tras desarrollar su arsenal atómico.
Comments