El empresario armenio Ruben Vardanyan, detenido en Azerbaiyán desde septiembre de 2023, ya no figura como accionista del sector automotriz ruso. Según informaron Kommersant y Forbes, Vardanyan abandonó Voskhod OJSC, la principal accionista de Kama JSC, compañía encargada de desarrollar el coche eléctrico ruso Atom.
Su participación del 25% fue transferida íntegramente a Voskhod, lo que marca su salida definitiva del proyecto Atom y del sector automotor ruso. En 2021, cuando se lanzó el proyecto, Vardanyan y el director ejecutivo de KAMAZ, Sergey Kogogin, habían invertido 360 millones de rublos cada uno.
“La salida de Vardanyan probablemente responde a su complicada situación personal”, explicó Maxim Shaposhnikov, analista de la Fundación del Código Industrial, citado por Kommersant.
Kama se negó a comentar la operación. Según los registros judiciales, Reneroy, empresa vinculada al grupo Rosatom, ya había adquirido una participación en Kama por 6.200 millones de rublos.

Vardanyan, exministro de Estado de Artsaj, fue arrestado en 2023 tras la ocupación de la región por Azerbaiyán. Está acusado de “financiar el terrorismo”, un cargo que podría derivar en cadena perpetua. En abril de 2024 protagonizó una huelga de hambre de tres semanas, que finalizó por pedido de su familia. Desde entonces, su detención ha sido prolongada repetidamente, y en diciembre la Fiscalía azerbaiyana presentó 45 nuevos cargos en su contra.
El otoño pasado, Vardanyan ya había perdido su participación del 15% en KAMAZ, valorada en 3.110 millones de rublos en la Bolsa de Moscú. Su salida de Voskhod marca el cierre de su última inversión activa en la industria automotriz rusa, consolidando un retiro forzoso que refleja el aislamiento económico y político que enfrenta el magnate desde su arresto.
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