SoyArmenio
Tiflis impidió el ingreso de un cargamento de flores armenias en la aduana de Sadakhlo-Bagratashen, alegando «insectos nocivos». La medida se suma a las demoras en exportaciones de brandy y vino, generando preocupación por un posible deterioro en las relaciones bilaterales.
Bloqueo de flores armenias en la frontera con Georgia
Un lote de 10.000 flores cortadas procedentes de Armenia fue retenido en el puesto fronterizo de Sadaylo-Saavtoyilo (también conocido como Sadakhlo-Bagratashen), según informó el Servicio de Impuestos de Georgia. Las autoridades georgianas afirmaron que las flores presentaban «daños por insectos nocivos» y no cumplían con los requisitos fitosanitarios del país.
«Durante los procedimientos de control de cuarentena, se detectó una discrepancia con las normas fitosanitarias de Georgia, específicamente la presencia de plagas en las plantas», señaló el organismo en un comunicado.
El cargamento, que debía ingresar a Georgia para su posterior distribución, fue devuelto a Armenia, siguiendo los protocolos establecidos por el gobierno georgiano. Este incidente ocurre un día después de que otro envío de flores con destino a Rusia enfrentara un destino similar.
Tensiones comerciales entre Armenia y Georgia
El bloqueo de las exportaciones armenias no se limita a las flores. Empresarios de Ereván han denunciado en las últimas semanas retrasos injustificados en las inspecciones aduaneras de productos como brandy y vino, claves para la economía armenia.
«Las autoridades georgianas están sometiendo nuestros productos a revisiones excesivamente largas, lo que genera pérdidas económicas», declaró un exportador armenio bajo condición de anonimato.
El ministro de Asuntos Exteriores de Armenia, Ararat Mirzoyan, reconoció el problema y aseguró que se está trabajando en una solución, aunque sin avances concretos. La situación ha llevado a protestas de empresarios armenios frente a la embajada de Georgia en Ereván, un hecho poco común que ha aumentado las suspicacias.
¿Problema técnico o tensión política?
La cancelación repentina de la visita del ministro de Agricultura de Georgia, prevista para el 6 de junio, ha alimentado especulaciones sobre un posible enfriamiento en las relaciones bilaterales. Fuentes oficiales armenias afirmaron que la delegación georgiana alegó «agenda sobrecargada», pero analistas sugieren que podría haber motivos políticos detrás.
Algunas hipótesis apuntan a que Georgia estaría cediendo a presiones de Azerbaiyán y Turquía, países con los que mantiene estrechos lazos económicos. Otros creen que Tiflis busca proteger a sus propios productores agrícolas frente a la competencia armenia.
Lo cierto es que, en un contexto donde Armenia depende críticamente de Georgia para sus exportaciones hacia Rusia y Europa, cualquier interrupción en el comercio bilateral representa un grave riesgo económico.
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