Armenia mantiene abierta una investigación penal contra la cúpula político-militar de Azerbaiyán por los eventos ocurridos en Nagorno-Karabaj (Artsaj) como genocidio. Según el Comité de Investigación de Armenia, el caso aún se encuentra en la fase preliminar. La causa penal se abrió el 20 de septiembre de 2023, un día después del inicio de la ofensiva militar a gran escala de Azerbaiyán sobre la región.
El conflicto tiene antecedentes recientes y críticos. El 12 de diciembre de 2022, un grupo de civiles azerbaiyanos bloqueó la carretera Stepanakert-Goris, única vía de conexión con Armenia, bajo pretextos “ambientales”. Aunque el bloqueo se levantó el 28 de abril de 2023, Azerbaiyán estableció un puesto de control en el corredor de Lachín el 23 de abril, tomando control total del área. En paralelo, Artsaj sufrió cortes de gas y electricidad desde Armenia, debilitando aún más la infraestructura de la región.
El 19 de septiembre de 2023, Azerbaiyán lanzó nuevamente ataques militares masivos, incluyendo cohetes y artillería, violando el alto el fuego. Según el Ministerio de Defensa de Artsaj, “alrededor de la 1:00 p.m., las fuerzas armadas azerbaiyanas violaron el alto el fuego a lo largo de toda la línea de contacto”. Este avance provocó un éxodo masivo de la población, dejando la región casi despoblada en pocos días. El Servicio de Migración y Ciudadanía de Armenia reportó que 115.365 personas fueron desplazadas por la fuerza.

Conmemoración del quinto aniversario de la guerra de 44 días
El 27 de septiembre de 2025 se cumplen cinco años del inicio de la guerra de 44 días. En 2020, Azerbaiyán inició una ofensiva militar que se extendió hasta el 9 de noviembre, cuando Armenia, Azerbaiyán y Rusia firmaron una declaración trilateral para poner fin al conflicto.
El Primer Ministro de Armenia, Nikol Pashinyan, publicó en su página de Facebook: “Gloria a los mártires y larga vida a la República de Armenia”, en memoria de los caídos durante la guerra.
Según datos del Comité de Investigación de Armenia de marzo de 2022, 3.822 personas, entre militares y civiles, murieron como resultado de la agresión azerbaiyana, mientras que 187 militares y 21 civiles permanecen desaparecidos hasta la fecha.
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