Detienen al arzobispo Bagrat Galstanyan y a miembros de la FRA en Armenia por intento de golpe de Estado

En un operativo sin precedentes, las fuerzas de seguridad armenias detuvieron al arzobispo Bagrat Galstanyan, líder del movimiento opositor Lucha Sagrada, y a destacados miembros de la Federación Revolucionaria Armenia (FRA), acusados de planear un intento de golpe de Estado y actos terroristas en territorio armenio.

La medida fue anunciada por el primer ministro Nikol Pashinyan, quien calificó la presunta conspiración como un plan “de gran escala y siniestro” dirigido por un “clero oligárquico criminal”.

“Los agentes del orden han frustrado un plan del clero criminal encabezado por Galstanyan para desestabilizar la República de Armenia y tomar el poder por la fuerza”, afirmó Pashinyan en su canal de Telegram, haciendo referencia directa a la investigación oficial en curso.

A petición del Comité Investigador, el fiscal supervisor decidió iniciar un proceso penal público contra 16 personas.

El equipo legal de Samvel Karapetyan anunció que, siguiendo instrucciones de Samvel Karapetyan, brindarán apoyo legal a las personas detenidas y arrestadas.

Un plan orquestado con 5.000 efectivos y sabotajes coordinados

Según el Comité de Investigación de Armenia, el movimiento habría planeado organizar 200 grupos de choque compuestos por exmilitares y expolicías —unos 5.000 efectivos en total— para actuar simultáneamente en todo el país.

Las autoridades acusan al grupo de preparar:

• Sabotajes a infraestructuras críticas
• Cortes de electricidad e internet
• Bloqueo de las fuerzas de seguridad
• Ataques cibernéticos a sitios del gobierno
• Asesinatos de civiles y disturbios masivos

Además, se habrían comenzado a recopilar datos estratégicos de Ereván, como localizaciones de semáforos, plantas de energía y rutas clave, así como la compra de armamento, explosivos, drones y artefactos metálicos para sabotear vehículos.

“Desde enero de 2025, más de 1.000 personas han sido reclutadas”, indicó el Comité. “El objetivo era sembrar el caos y distraer a las autoridades mediante manifestaciones simultáneas”.

Allanamientos masivos y material incautado

Más de 90 registros fueron ejecutados por el Servicio de Seguridad Nacional en viviendas de militantes y líderes opositores. Durante los operativos, se encontraron:

• Armas de fuego y municiones
• Listas de reclutamiento
• Planes detallados de acción
• Drones, bombas de humo y picos metálicos
• Sustancias similares a drogas
• Documentos con nombres asignados a futuros cargos tras la toma del poder

Los allanamientos incluyeron las casas de los miembros de la FRA Igor Sargsyan, Vardan Avagyan, Artashes Oinyanyan y Varazdat Amihyan. Sargsyan fue detenido tras el registro. También se informó la detención de Ara Rostomyan, Migran Makhsudyan, el exdiputado de Artsaj Davit Galstyan y el registro de la residencia del exgobernador de Syunik, Vahe Hakobyan, así como de su esposa, la periodista Elizabeth Petrosyan, directora de Para TV.

¿Golpe frustrado o persecución política?

Hasta el momento, las autoridades han presentado pruebas pero no concluyentes ante la opinión pública. El Comité ha publicado una serie de videos de vigilancia secreta, que, según sostiene, demuestran la existencia del plan insurreccional.

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El propio arzobispo Galstanyan ironizó sobre los cargos en su contra:

“Cometimos terrorismo”, dijo en tono sarcástico, restando seriedad a la acusación.

Desde el movimiento Lucha Sagrada, calificaron la operación como un intento del gobierno de desactivar a la oposición organizada mediante detenciones masivas y criminalización del disenso político y religioso.

Reacción del Kremlin: “Asunto interno de Armenia”

El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, se pronunció respecto a los hechos, expresando que:

“Este es, sin duda, un asunto interno de Armenia. Por supuesto, estamos interesados en que Armenia sea un país próspero, estable y amigo de Rusia”, declaró Peskov, según informó RIA Novosti.

El Kremlin evitó hacer una evaluación sobre la veracidad de las acusaciones, aunque dejó en claro su expectativa de que se mantenga la estabilidad institucional en el país.