SoyArmenio
Cientos de turcos nacionalistas atacan un barrio con refugiados sirios en el distrito de Altindag de Ankara el miércoles por la noche, incendiando autos, casas y saqueando tiendas al grito de «Dios es el más grande».
Una turba nacionalista de la capital turca merodeó por el barrio de Altindag el miércoles por la noche, dejando un rastro de devastación y terror. Unas mil personas marcharon por los distritos de Battalgazi, Önder y Çamlık gritando insultos. Algunas personas iban armadas con garrotes y otros objetos y atacaron las casas, las tiendas y los coches de los refugiados sirios. Las ventanas de varias tiendas fueron destrozadas y saqueadas, el inventario fue destruido y algunas fueron incendiadas.
Coreando consignas como «Ya Allah bismillah, Allahu ekber» (Oh Dios, en el nombre de Dios, Dios es el más grande), a menudo asociadas con grupos conservadores en Turquía, arrojaron piedras contra edificios residenciales y al menos un niño sirio resultó herido.
La policía no intervino, sino que escoltó a la multitud, que incluía mujeres, diciéndoles: «Siempre estamos aquí para apoyarlos». La multitud pudo sembrar el miedo y el terror durante horas. La policía no intervino hasta más tarde esa noche.
La policía de Ankara dijo luego que detuvo a 76 personas que participaron en disturbios y porque distribuyeron «noticias falsas en las redes sociales para provocar al público».
Treinta y ocho de ellos tenían antecedentes penales de saqueo, asalto y posesión de drogas, agregó.
¿Qué pasó en realidad? (para los medios turcos)
Según los medios turcos corroborados por Soyarmenio , esta violencia fue precedida por una pelea con cuchillos el día anterior. Se sospechaba que un refugiado sirio apuñaló a un turco de 18 años e hirió a otro el martes por la noche después de una disputa. Inmediatamente después del incidente, una turba agresiva atacó hogares y negocios sirios en Altindag. La policía intervino con cañones de agua y ahuyentó a la multitud. Varias familias sirias fueron evacuadas del vecindario esa noche para su propia protección.
Situado en las afueras de Ankara, Altindag es conocido por ser un barrio conservador y de bajos ingresos. Dos residentes que aparecieron en los medios locales justificaron los ataques diciendo que querían a los refugiados sirios y afganos se fueran del país.
El incidente se desató el martes, cuando varios medios locales dijeron que dos residentes turcos atacaron a dos sirios en un parque en Altindag. Uno de los sirios presuntamente se defendió apuñalando aun joven turco de 18 años, que murió en el hospital.
Un país con discursos racista
El estado de ánimo contra los refugiados en el país se calentó en las últimas semanas. Entre otras cosas, los videos en las redes sociales de afganos cruzando ilegalmente la frontera con Irán hacia Turquía causaron revuelo.
El mes pasado, Kemal Kilicdaroglu, líder del opositor Partido Republicano del Pueblo (CHP), advirtió al gobierno que los refugiados de Siria y Afganistán representaban una amenaza para la seguridad nacional. Kilicdaroglu prometió que el CHP enviaría a todos los sirios de vuelta a su país si su partido toma el poder en las próximas elecciones del país, y negó que tal medida fuera racista.
En las últimas semanas, miles de usuarios de redes sociales en Turquía atacaron los derechos de los refugiados en el país, con el hashtag «no queremos refugiados en mi país» como tendencia. Los políticos también se subieron al discurso anti extranjero en un intento por ganarse el favor del público.
Funcionarios del recientemente fundado Partido democracia y progreso (Deva) también criticaron el mal manejo por parte del gobierno de la llegada de migrantes como la causa principal de los incidentes. El mes pasado, Tanju Ozcan, un alcalde de CHP en Bolu, dijo que cobraría a los refugiados sirios seis veces el precio regular por los servicios de agua y eliminación de basura.
