El centro de estudios International Forum For Rights And Security (IFFRAS) advirtió la necesidad de monitorear cuidadosamente la alianza entre China, Pakistán y Turquía, ya que promueven y sostienen sus intereses conjuntos en plataformas internacionales.

IFFRAS cree que, bajo el liderazgo de China, los regímenes autoritarios de Turquía y Pakistán afirman una «narrativa muy peligrosa» contra la libertad occidental.
Como ejemplo dice que hay un patrón; y que que cuando China está al frente de los asuntos en una organización internacional, inmediatamente ayuda a que entren Turquía y Pakistán.
A lo largo de los años, Pakistán y Turquía fortalecieron sus vínculos económicos y estratégicos con China; dependiendo cada vez mas no solo de su dinero, sino también de su influencia mundial.
China, Turquía y Pakistán también intentan mantener la presidencia en diferentes organismos internacionales para influir en su funcionamiento; así como para colocar a sus propios representantes en puestos de toma de decisiones dentro de estos foros.
Un estudio reciente reveló que China se encuentra en una posición primordial en numerosos foros multilaterales vitales, con personal preferido y financiamiento priorizado, informó IFFRAS, según cita SoyArmenio.
Como avanza China
Los múltiples objetivos de China comprenden varios ítems; desde la generación de nuevas normas globales para la gobernanza, para las finanzas, infraestructura y recursos humanos; así como intenta manipular todo el proceso de globalización para establecer la agenda china.
Términos como la «trampa de la deuda», la «ruta de la seda de la salud», la «ruta de la seda digital» y la «ruta de la seda espacial», se dirigen a describir la naturaleza de las deliberaciones chinas en las relaciones internacionales para lograr las ambiciones globales del país.
Este dominio cada vez mayor en la arena internacional se basa en una multitud de factores económicos; que van desde el apoyo monetario ampliado de China a las Naciones Unidas, tanto como miembro, como en forma de donaciones voluntarias. China es el segundo donante más grande con 12% de contribuciones obligatorias y es el quinto donante voluntario más grande de la ONU.
China dedica de manera muy estratégica su gente y experiencia a construir credibilidad y dar forma a los objetivos de desarrollo, a través de instituciones globales desde el prisma de sus propios intereses.
Como Turquía responde
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que tiene la ambición de recuperar la gloria del antiguo Imperio Otomano, incursionó en muchas aventuras militares que dejó al país en dificultades financieras.
La Iniciativa «Ruta de Ruta» (BRI) de China le dio al país una profundidad estratégica como centro de comercio y transporte, al interconectar los continentes de Asia, África y Europa.
De hecho, fue una inversión del BRI el proyecto del Corredor Medio de Turquía para acceder al Cáucaso y Asia Central a través de la línea ferroviaria Kars-Tbilisi-Bakú.
Aprovechando a China, Turquía se benefició del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (AIIB) liderado por China, y también como observador en la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS).

Sumando a Pakistán
Impulsado por un proceso de pensamiento islámico radical orientado a ampliar los lazos basados en la religión, Turquía se acercó a Pakistán a lo largo de los años.
Los dos países también estuvieron trabajando en un acuerdo militar de alto nivel que posiblemente involucre el intercambio de tecnología relacionada con el desarrollo de armas nucleares, dice IFFRAS.
De hecho, tanto China como Turquía intentaron rescatar a Pakistán en repetidas ocasiones del radar del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), el organismo de control global del lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo, donde fue incluido en la lista gris debido a sus vínculos con el terrorismo.
Los llamados hermanos de hierro, China y Pakistán también llegaron a un acuerdo para fortalecer su colaboración con las Naciones Unidas y otras organizaciones multilaterales globales para apoyar sus preocupaciones fundamentales.
Turquía y China hablaron repetidamente sobre temas a favor de Pakistán en las Naciones Unidas. Si bien China se aseguró de que Pakistán obtenga el estatus de observador en la Organización de Cooperación de Shanghai, Pakistán está tratando de incluir a China en la SAARC.
Comments