El Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia pidió a Turquía y Azerbaiyán que dejaran de sabotear el alto el fuego acusando a Armenia de rechazar una solución pacífica a los ataques turcos contra Karabaj
«Hoy, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Azerbaiyán emitió una declaración manipuladora, en la que se intenta presentar a Armenia como la parte que rechaza la solución pacífica del conflicto de Nagorno-Karabaj», dice el comunicado.

«Pedimos a Azerbaiyán y a su patrocinador, Turquía, que abandonen su tradicional política de sabotear los esfuerzos de la comunidad internacional encaminados a establecer un alto el fuego controlado y echar la culpa al lado armenio«, dijo el comunicado.
«Armenia apoya constantemente la aplicación incondicional de los acuerdos de alto el fuego del 10 y 17 de octubre, acordados con la asistencia de los líderes de los países copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE. Hablando constantemente desde posiciones que excluyen una solución militar del conflicto, una vez más hacemos hincapié en que el conflicto de Nagorno-Karabaj puede resolverse exclusivamente por medios pacíficos en el marco de la copresidencia del Grupo de Minsk de la OSCE», dice el comunicado.
La guerra por la independencia de Artsaj
Armenia, con vínculos militares tradicionalmente estrechos con Rusia, está siendo atacada por Azerbaiyán con el apoyo político y militar de Turquía, miembro de la OTAN; lo que desencadenó en un sangriento estallido de combates en las últimas semanas.
Si bien Turquía dice que solo brinda «todos los medios» de apoyo a su aliado cercano Azerbaiyán, negado acusaciones de participación directa en los combates; diferentes informes ya comprobaron la participación directa del gobierno de Erdogán en el ataque, el apoyo de la aviación estacionada en Azerbaiyán, la contratación y traslado de terroristas sirios a la zona y el despliegue de «asesores militares» turcos entre las tropas azerbaiyanas.
Rusia, potencia regional, hasta ahora apoya a Armenia pero sin honrar el acuerdo de defensa mutuo, mientras busca preservar sus fuertes lazos politicos y económicos con Azerbaiyán y Turquía.
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