Milkes Malakkian El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinyan presentó su renuncia, liberando formalmente el camino para la celebración de elecciones parlamentarias anticipadas en un esfuerzo por desactivar una crisis política provocada por la guerra del país el año pasado con Azerbaiyán.
“De acuerdo con un acuerdo con el presidente y las fuerzas políticas, hoy renuncio para realizar las primeras elecciones parlamentarias el 20 de junio“; anunció Pashinyan en Facebook el 25 de abril, Día del Ciudadano.
Pashinyan dijo que planea continuar cumpliendo con sus deberes como primer ministro hasta la votación y planea participar en las elecciones.
“Seré candidato a primer ministro”, dijo Pashinyan, quien se postulará como candidato para su partido del Contrato Civil. “Si la gente decide que debo renunciar como primer ministro, haré su voluntad; y si quieren que continúe con mi trabajo como primer ministro, acataré la voluntad del pueblo”.
La medida sigue a los cambios recientes realizados en el Código Electoral de Armenia que, según la oposición, ayudará a que el partido gobernante gane.
Los cambios elaborados por la alianza gobernante Mi Paso renovó partes del Código Electoral introducido en 2016 por el Partido Republicano de Armenia (HHK). Dos años antes de que Pashinyan asumiera el cargo tras liderar protestas masivas contra ese partido pro ruso del ex presidente Serzh Sarkisian.
Las enmiendas cambiarán el sistema electoral del país del Cáucaso a uno totalmente proporcional, según informa SoyArmenio.
Hasta este punto, los armenios habían votado por partidos y alianzas, así como por candidatos individuales; mientras que las próximas elecciones se llevarán a cabo solo por listas de partidos.
Elecciones y crisis
Armenia está envuelta en una crisis política desde que Pashinyan firmó un alto el fuego negociado por Rusia en noviembre de 2020 para poner fin a la guerra con Azerbaiyán por Nagorno-Karabaj.
Tras las conversaciones con la oposición, Pashinyan acordó en marzo realizar la votación anticipada en junio.
Las encuestas de opinión muestran que la confianza pública en el gobierno de Pashinyan cayó drásticamente desde entonces; con su índice de aprobación que fue del 60% al 30% actual.
