El mercado del vino en la Unión Económica Euroasiática (UEE) debe funcionar en igualdad de condiciones para los cinco países sin discriminación alguna, afirmó hoy, 21 de junio, el Primer Ministro de Armenia, Nikol Pashinyan, en una reunión ampliada del Consejo Intergubernamental de la UEE celebrada en Minsk.
“Necesitamos establecer objetivos y principios comunes, medidas regulatorias sin restricciones discriminatorias en el comercio mutuo. Para Armenia, esta es una dirección prioritaria, que brinda amplias oportunidades de exportación”, señaló el jefe de gobierno.
Según Pashinyan, la experiencia muestra que una parte significativa de los obstáculos que enfrentan las empresas surge de la falta de coordinación de las reglas. Solo una disposición para el diálogo puede ayudar a mantener una dinámica positiva en el comercio mutuo, expresó con confianza el primer ministro Pashinyan.
La contradicciones que comentó el primer ministro armenio, es lo que pasó en junio de 2020, cuando sorpresivamente Rusia puso en vigor la ley “Sobre la viticultura y la elaboración del vino en la Federación Rusa”, según la cual los productores debían indicar en las etiquetas de qué variedades de uva se produjo un determinado vino o coñac.

De esa forma, los vinos de frutas perdieron el derecho a llamarse así, lo que entró en contradicción con el etiquetado que se hace en Armenia, que exporta mucho vino de frutas y de granadas.
Es de recordar que ante las restricciones y retrasos en los suministros, Rusia sustituyó los habituales vinos italianos, españoles o franceses por vinos de Armenia, Grecia, Chile, Argentina y Serbia.