Varias organizaciones periodísticas y medios armenios emitieron una declaración conjunta sobre el proyecto de ley aprobado por la Asamblea Nacional de Armenia para triplicar la multa por injurias y calumnias.
El 24 de marzo, el parlamento de Armenia en segunda lectura aprobó plenamente el proyecto legislativo presentado por el vicepresidente Alain Simonyan. «Sobre la modificación del Código Civil» aumentaba el monto de la compensación por insulto y calumnia aumenta a AMD3 y AMD6 millones, respectivamente.
Los autores de la declaración consideran este cambio extremadamente peligroso. Eespecialmente dada la propensión de las autoridades, políticos y otras personas famosas a tomar incluso críticas objetivas como insultos y calumnias e ir a los tribunales.
Como informara SoyArmenio, la versión original del proyecto aprobado en primera lectura preveía multiplicar por cinco los umbrales superiores de indemnización por injurias y calumnias.
Más tarde, como resultado de los debates parlamentarios en Armenia, se limitó a tres veces. Los medios armenios creen que la multa por injurias es impagable; por la situación socio económica del país en general; y por las capacidades financieras de los medios de comunicación en particular.
Una historia de marchas y contramarchas
El mes pasado, la Asamblea Nacional aprobó en primera lectura el proyecto de ley redactado por la vicepresidenta del Parlamento, Alen Simonyan; que endurecía el monto de la indemnización por injurias y calumnias.
Según la propuesta del diputado, las enmiendas al Código Civil proponen fijar el monto de la indemnización hasta AMD5 millones en lugar de AMD1 millón por injurias, y hasta AMD10 millones en lugar de AMD2 millones por calumnias.
La difamación y el insulto en Armenia fueron despenalizados en 2010; cuando el gobierno tomó en cuenta el llamado a abolirlo por parte de los estados miembros de PACE.
Varias organizaciones periodísticas ya habían emitido un comunicado en septiembre, oponiéndose a los cambios adoptados hoy. Shushan Doydoyan, presidente del Centro de Libertad de Información, decía que la difamación seguirá difundiéndose desde perfiles anónimos.
“Manifestamos que este es un proyecto impulsado por motivos puramente políticos, que de ninguna manera puede contribuir, por ejemplo, a la lucha contra el periodismo irresponsable, o la lucha contra la desinformación, o la lucha contra la calumnia o el insulto. En otras palabras, es absolutamente inútil, al mismo tiempo que incluso puede poner en grave peligro al golpear a los medios libres y al derecho a la libre expresión en general”.