El Catolicos Aram I declaró 2022 el Año de la Diáspora Armenia debido a la situación actual de la misma y su papel clave en la vida armenia. La Declaración Pontificia del 9 de enero se leyó durante la liturgia en la Catedral de San Gregorio el Iluminador.

Aram I afirma en su declaración; que el pueblo armenio enfrenta varios desafíos, y la Diáspora aún más, porque hay incertidumbre, luchas y una búsqueda de identidad; que hacen imperativa su reorganización inmediata.
Según la La Declaración Pontificia , el pueblo armenio en la Diáspora pasa por una situacion muy difícil, señalando que la emigración es casi una característica permanente en la historia de Armenia por razones económicas y políticas. En este contexto, el Patriarca enfatiza que los armenios lograron establecer colonias en sus países establecidos con estructuras nacionales, espirituales y educativas, y no se cansaron de desarrollar relaciones con los habitantes de ese país.
Por otra parte, asegura Aram I que la diáspora está pasando por una discordia entre las diáspora tradicional armenia y la de Rusia, donde el valor de ser armenio no tiene líneas claras. El patriarca dice que si bien las instituciones nacionales tradicionales jugaron un papel importante en el pasado, hoy corren el riesgo de quedar obsoletas, con su estilo de trabajo y agendas no vigentes. Su Santidad remarcó que un gran problema es el idioma.
Hablando sobre las regiones y el proceso de reorganización de la Diáspora, Su Santidad señaló que las preocupaciones y desafíos mencionados en la declaración necesitan una discusión profunda, realista y completa. «La Diáspora no es una realidad contraproducente. Siempre debe mantener su visión en la dirección de Armenia, que es la columna vertebral del presente y el futuro de la nación armenia», dijo. Además, el Patriarca pidió la mejora de las estructuras diocesanas y comunitarias y la implementación de una cooperación armoniosa entre ellas. Para este trabajo sugiere la preparación del ambiente, la iniciativa y finalmente la implementación de programas.

El patriarca concluye la declaración diciendo: «Fiel a su pasado, el pueblo armenio está llamado a reevaluarse y renovarse continuamente de acuerdo con los tiempos, las condiciones y los desafíos cambiantes. Con esta visión y compromiso, la Diáspora debe reorganizarse y revitalizarse. Dejar la Diáspora en su estado actual significa acelerar su autodestrucción. La reorganización de la Diáspora es su fortalecimiento, y el fortalecimiento de la Diáspora es el fortalecimiento de Armenia y Artsaj. y esta es una prioridad nacional y un desafío. Es necesario ponerse manos a la obra de inmediato «.
Cabe señalar que la Declaración Pontificia será leída en todas las iglesias de las Diócesis del Catolicosado de la Gran Casa de Cilicia.